La guerra de trincheras, con las líneas de defensa situadas dentro del alcance eficaz del fusil, es muy adecuada para el paqueo. Así lo entendieron ambos bandos, destacando a sus mejores tiradores en posiciones cuidadosamente elegidas, para hacer fuego principalmente de hostigamiento y mientras tanto vigilaban el terreno con prismáticos. Al fuego de los francotiradores se contestó con el de los contra-francotiradores, los cuales estaban tan bien escogidos y situados que disparaban sobre el fogonazo de los francotiradores enemigos.474849
Durante esta contienda, el ejército del káiser hizo ya un abundante uso de fusiles dotados de mira telescópica. Sin embargo, a los reglamentarios Gewehr-98 habrían de sumarse multitud de fusiles de caza con mira telescópica que fueron requisados por la premura de su empleo y la necesidad de la guerra. Muchas de estas armas no fueron empleadas por francotiradores propiamente dichos, sino por expertos que desde su trinchera hostigaban a la de enfrente para «impedir el aburrimiento» entre la tropa enemiga y abatiendo a cualquier enemigo que asomara la cabeza. Al comienzo de la guerra los primeros en emplear fueron los alemanes, ya que se dieron cuentas que las habilidades de algunos soldados que en su vida cicil habían sido cazadores y guardas forestales eran ideales para la guerra de trincheras.5051 Se diseñaron medidas y contramedidas frente a aquellos mortales y desmoralizadores disparos: escudos de acero sujetos al casco del francotirador con la misión de proteger su rostro, maniquíes con el fin de engañar al enemigo y que descubrieran su posición, etc. Ante el impacto en la moral de los francotiradores alemanes los ingleses, impulsados por la insistencia del mayor Hesketh-Prichard, crearon en 1915 una escuela de francotiradores, llamada 1st Army Sniping, Observation and Scouting School (1st SOS), basada en Linghem. En ella se formarían francotiradores ingleses, canadienses, americanos, franceses, australianos y portugueses. Varias escuelas fueron creadas después en Francia por los ingleses, e incluso otra en Egipto en 1917. En ellas los soldados aprendieron a emplear todo tipo de camuflaje y a actuar en en parejas de tirador y observador (los alemanes preferían actuar solos). La llegada de francotiradores aliados supuso el comienzo de la lucha entre francotiradores de ambos lados. La posición de tiro más habitual para un francotirador era en la trinchera, aunque también tomaban posiciones en tierra de nadie para abatir objetivos importantes, como nidos de ametralladora y observadores de artillería antes de un ataque. |
En la guerra civil también se emplearon francotiradores, más tiradores selectos que propiamente francotiradores, ya que era una táctica bien conocida por el ejército español en sus guerras coloniales. Los francotiradores eran llamados pacos en la jerga de la época. No existía en el ejército español de entonces entrenamiento específico de francotirador ni fusiles con mira telescópica reglamentarios, ya que era algo mal visto en el ejército de la época. Si se promovía que los mejores tiradores acecharan al enemigo, pero el empleo de miras telescópicas no llegaría al ejército español hasta los años 60, cuando algunos Mauser 43 fueron equipados con miras Enosa al ser reemplazados por el Cetme. Durante la Guerra Civil, el tirador de precisión tenía que recurrir a los fusiles estándar y a su buena puntería. Se sabe que asesores rusos trajeron a título personal algunos fusiles Mosin de francotirador con miras PE, según algunas fuentes como respuesta a los fusiles Mauser de francotirador que Alemania habría hecho llegar a España.75 Además los asesores emitieron a su vuelta a la URSS informes favorables del empleo en combate de francotiradores. Es posible que entre los contingentes de alemanes e italianos pudiera haber llegado algún francotirador y que más tarde en el ejército nacional hacia el final de la guerra hubiera también alguno.
En numerosas batallas se vio el empleo de francotiradores. Esto sucedió especialmente allá donde hubo La guerra de trincheras o combates urbanos, como sucedió en el Frente de Madrid. George Orwell fue herido por un francotirador cerca de Huesca, en mayo de 1937. En la guerra civil española era frecuente que los francotiradores estuvieran colocados junto a las posiciones de las ametralladoras para enmascarar así los disparos |
Ante la invasión relámpago, el francotirador de la Unión Soviética tuvo que improvisar progresivamente la respuesta: comenzando por combates aislados y replegándose sobre el terreno ante el imparable avance enemigo, para pasar posteriormente a constituir un numerosísimo contingente bien instruido y muy eficaz en sus operaciones, estableciendo los equipos de «binomios» que se complementaban en todo momento. Muchos francotiradores soviéticos se convirtieron en leyendas y recibieron el título de Héroes de la Unión Soviética, la más alta condecoración. La propaganda del ejército soviético creó el culto al francotirador, además los francotiradores gozaban de privilegios que no estaban al alcance del resto de soldados de infantería. La propaganda soviética encontró en el francotirador el símbolo ideal, causaban terror entre los militares enemigos y eran un modelo para los soldados propios de efectividad y economía en combatir con el enemigo.8889
Desde 1932,90 los soviéticos emplearon el fusil reglamentario de su infantería, el Mosin-Nagant, dotandolo de miras ópticas (PU de 3,5 aumentos, que si bien cumplían con su cometido, resultaban de una calidad muy inferior a las Zeiss y Kahles del Ejército Alemán).51 De calibre 7,62 mm, este fusil de cerrojo, algo incómodo y largo, era perfectamente comparable en potencia y precisión al Kar 98k. También se utilizó el Samorzaryadnaya Vintonvka Tokarev 40 (fusil semiautomático Tokarev-SVT), aunque su precisión no era como la de un fusil de cerrojo, tenía mayor cadencia de tiro y doble capacidad de munición.9192 Los soviéticos descubrieron que el puesto de francotirador se ajustaba bien para las mujeres, dado que eran pacientes, pequeñas por naturaleza y con una condición aeróbica mayor que el de los hombres, de tal manera que evitaban usarlas en combate cuerpo a cuerpo, algunas de ellas resultaron ser tan letales como sus pares masculinos, entre ellas se destacaron Roza Šánina(59), Ziba Ganiyeva (21), Liudmila Pavlichenko (309 bajas con especialidad en tiros a la cabeza), Nina Alexeyevna Lobkovskaya (89). La Escuela Central de Francotiradoras, próxima a Moscú y dirigida por Nora Chegodaeva, existía antes de 1941.93949596 |
El tirador de los Royal Marines, Matt Hughes durante la invasión de Iraq en 2003 abatió a un francotirador enemigo. El viento estaba soplando tremendamente. Además, Hughes sólo tenía una oportunidad, ya que el blanco estaba protegido y a poco más de 860 metros de distancia. Durante la invasión la avación y artillería aliada castigaron los edificios donde se parapetaban los francotiradores iraquíes.
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